Médico especialista en Radiología. Subespecialista en Intervencionismo Vascular y Periférico. Máster en Patología Mamaria.
Hace 24 años, José Francisco Delgado terminaba su etapa escolar en nuestro colegio y se preparaba para perseguir un nuevo sueño: la medicina. Después de su grado, ingresó a la Universidad Libre seccional Cali donde se formó como profesional de salud y por su destacado desempeño, logró obtener una beca para ser parte del William Harrington Medical Training Program for Latin American Students y realizar su año de internado en el Jackson Memorial Hospital en Miami, Florida. Allí, estuvo durante el 2001 y en 2002, recibió su título como Médico General.
Del sureste de América del Norte, se trasladó a Argentina; donde realizó una especialización en Radiología en la Fundación Científica del Sur de Buenos Aires, durante cuatro años. En el Capital del Tango, llevó a cabo también una subespecialidad en Radiología Intervencionista y Cirugía Endovascular con Investigaciones Vasculares, durante los años 2011 y 2012. Al culminar, nuestro egresado emprendió vuelo una vez más y se radicó en España, donde cursó una maestría en Senología y Patología Mamaria en la Universidad de Barcelona, durante los años 2017 y 2018.
Actualmente, José Francisco se desempeña como radiólogo intervencionista en la Clínica de Occidente en Cali, Colombia; donde cumple un rol fundamental en la detección y diagnóstico temprano de cáncer de seno y otras enfermedades mediante diferentes técnicas de biopsias. Asimismo, hace parte de Sura y La Fundación Unión de Lucha Contra el Cáncer ´Unicáncer´, donde se encarga de las biopsias de seno ambulatorias para el diagnóstico temprano de cáncer. A lo largo de su carrera, ha sido también docente de radiología en la Universidad Santiago de Cali y la Universidad San Martín.
“Lo que más destaco del Colegio Jefferson es el bilingüismo. Sin duda, aportó para mi éxito profesional”, afirma nuestro egresado quien también agradece al colegio por darle la oportunidad de conocer amigos incondicionales para toda la vida y desarrollar amor y respeto por los demás. “Del colegio probablemente tengo parte de los mejores recuerdos de mi vida: amigos, deportes y enseñanzas. Sus docentes, sus directivas y sus empleados, son personas que entregaron muchas de sus mejores cualidades para hacer de nosotros personas emprendedoras y capaces de afrontar la vida con fortaleza y dedicación”, sostiene.
Su gran vínculo con nuestro colegio, lo llevó a convertir a su hija Marthina, en una Jefferson. Hoy en día, la pequeña cursa por transición. “Podría decir que el Colegio Jefferson es enseñanza basada en la evidencia. Simplemente es parte de mi vida, una parte que llevaré siempre en mi corazón con orgullo y admiración”, culmina José Francisco.